(...)

He llegado a la conclusión de que no hay nada peor que no sentir "nada".
Estar bloqueada, en stand by...
Quizas me arrepienta, pero preferiría que me golpeen con una manopla en el medio de la sien con tal del volver a sentirme capaz de sentir.
En realidad ni siquiera sé si no siento. Más bien estoy tratando de impedir que todas las cosas que tengo dentro se queden ahí, porque si no podría ahogarme en un tsunami de emociones que automaticamente me dejaría(n) sin aire.
Necesidad.
Es tan ambigua -en todos sus modos y formas-.
¿Quién puede nombar sus propias necesidades sin caer en una sarta de idioteces que son más innecesarias que ...?
No te puedo decir qué necesito si no sé qué no necesito (o algo así):
me siento un toque sola, pero no tengo la necesidad de estar acompañada. Siento que la mínima cercarnía a un individuo ajeno a mí me provocaría un ahogamiento in soportable.
Tengo;
tengo;
tengo;
me falta:
Me pregunto porqué la vida gira alrededor de esos dos "conceptos" y porqué si todos intentamos ser tan poco superficiales (tan profundos) no los evitamos, fijándonos, en cambio, en cómo -carajo- llegar a la mismísima nada; donde nada tengo y nada me falta, ya que "de la nada, nada sale" (...)
Quizas el estado de inexpresión es el indicado para no ser nada; por lo tanto, es el indicado para cultivar nuevas semillas nada son y que en el futuro nada darán.